Este Blog se comenzó a escribir al terminar el viaje. No sé el motivo de no hacerlo en tiempo real, pero siento la obligación de compartir con familiares y amigos íntimos todas las emociones que sentí disfrutando con mi esposa Alicia, e hijos, Tito y Baby, estos 14 días por lugares de España y el sur de Francia, y sobre todo el reencontrarnos en mi “pueblin” natal, Gijón, con los primos que compartí mi infancia (1951-1960) hace50 años, y sobre todas las cosas, que mis hijos lo disfrutaran como creo que lo disfrutaron.
Con amor a ellos todos y a la memoria de mis padres y tíos que no están con nosotros y a mi hermano José Román que nos dejó unos días antes de comenzar el viaje.

domingo, 28 de marzo de 2010

Gijón y sus alrededores en el segundo día

Otro día de lindo sol que podemos observar desde la ventana de la habitación ya temprano en la mañana con una increíble vista del los edificios costaneros, el Muro con su Playa San Lorenzo y a lo lejos, también hacia el oeste, La Iglesia San Pedro y el cerro Santa Catalina en Cimadevilla. Hacia el este observamos parte de la Providencia.

Bajamos primero por un café y a desayunar, y por segunda vez sin los chamos, hasta esperar a los compadres que vemos venir campantes paseando por el Muro a la hora programada.

Salimos cerca de la 10 de la mañana, y como es domingo, quisimos llevar a los chicos a conocer el popular “RASTRO”, conocido por nuestros lares como “pulguero” o “flea market” que desde mis tiempos montan todos los años, antes a orillas del río Piles, hoy en el Parque Hermanos Castro, al lado del “Pueblo de Asturias” desde el 28 de agosto de 2008. De todo se consigue, desde ropa hasta comida, puestos de churros, mercaderes inmigrantes ilegales, ropa deportiva, que hasta Sara le compró a su nieto Diego la camiseta del Sporting de Gijón.

Churros con Chocolate en un simpático carrito aprovecharon a desayunar los muchachos, porque por los vientos que soplan el almuerzo parece que viene tarde y pensamos hacerlo en un restaurant típico asturiano que queda en el camino y es propiedad de una familia española-venezolana y que vienen con una gran recomendación para saborear la mejor FABADA asturiana.

Cangas de Onís es nuestra primera parada, que por ser domingo y estar el día tan espectacular, conseguimos estacionar algo lejos del pueblo debido a la gran cantidad de turistas locales y extranjeros que vienen a saborear la gastronomía asturiana en una gran cantidad de restaurantes por todo el pueblo, buscar alguna artesanía de recuerdo, y sobre todo visitar la gran obra de la ingeniería medieval, el Puente Romano, perfectamente remodelado y conservado que te permite transportarte a esa hermosa época de la historia, donde tropas a pie y caballo usaban esta obra para atravesar de una orilla a otra el Río Sella, hoy del concejo de Cangas de Onís a Parres.
 
Primeras fotos con los compadres
Aunque es conocido como el puente romano, su construcción fue durante el reinado de Alfonso XI de Castilla y de León con su famoso arco peraltado y otros dos arcos menores que son desiguales, este puente bien pudiera ser una reconstrucción de otro anterior, ya que esta zona sufrió una gran romanización. Esta construcción es conocida como el “puentón”. Está declarado Monumento Histórico Artístico.En sus aledaños suelen ir a pescar salmones numerosos ribereños de la zona del río Sella.

Por arriba y por debajo caminamos el puente en esta capital española de la época cuando el Rey Pelayo estableció su cuartel general y comenzó la reconquista de España. Paseamos por su plaza principal buscando el tradicional “platico” recordatorio del lugar para llevárselo a NINA en Maracaibo y ampliar su colección de más de 500 platos de diferentes partes del mundo y que adornan nuestra casa.

La ciudad de Cangas de Onís fue capital del Reino de Asturias hasta el año 774. En esta población se estableció el rey Don Pelayo, y desde aquí emprendió con sus gentes acciones sobre los territorios del norte de España, como único foco de resistencia al poder musulmán, una vez desaparecido el Reino visigodo. En este término municipal tuvo lugar en el año 722 la Batalla de Covadonga, donde Don Pelayo venció a la fuerzas musulmanas y consolidó un poder y prestigio que le permitió permanecer independiente y fundar el primer reino cristiano posterior a la derrota de los visigodos en la Batalla de Guadalete.

La población de Cangas de Onís está asentada en el entronque de los ríos Sella y Güeña, siendo este último afluente del anterior. En el valle situado entre ambos ríos se encuentra la capilla de la Santa Cruz, que fue un templo de época romana, reconstruido durante el reinado de Favila de Asturias y en cuyo frente nos estacionamos por lo que verán algunas fotos de esta capilla.

Sobre el montículo artificial el Rey Favila y su mujer Froiluba ordenan construir en el año de 737 la iglesia de la Santa Cruz, según reza en la lápida original del templo la iglesia fue consagrada el 27 de octubre del año 737.El templo se denominó de esta forma pues albergó la cruz de roble que Pelayo portaba en la Batalla de Covadonga y que más tarde se convertiría en La Cruz de la Victoria. Se cree que fue el primer templo cristiano que se construyó en Asturias y por tanto en España después de la invasión de España por el Islam. También se dice que la lápida de consagración es el primer monumento literario de la Reconquista.

La iglesia fue totalmente restaurada en dos ocasiones, la primera en 1632 y la segunda en 1950, tras su destrucción durante la guerra civil, en agosto de 1936, cuando las autoridades locales tomaron la decisión de derruir la iglesia para dejar a la vista un dolmen respetado por los constructores de la primitiva capilla.

Del templo inicial sólo se conserva la lápida de consagración.

Horrios, cafés y merenderos al aire libre, chigres, grandes locales para bodas y recepciones, y nosotros poco a poco aunque se hace tarde, continuamos nuestro camino hacia el destino principal del viaje, Los Lagos y Covadonga, pero con la inquietud de si comer primero o después ya que estamos en hora pico que puedan cerrar algunos de los lugares, y como el hambre puede más que otras cosas, Casa Morán nos espera porque decidimos comer primero.

En un desvío en el camino, en un poblado-capital del concejo de Onís, Benia de Onís, la Familia Morán, quienes tuvieran en La Guaira, Venezuela el famoso restaurante “Las Quince Letras”, nos reciben como parte de su “Casa Morán”, ya conocidos por los compadres, y después de los saludos, una “botellina” de SIDRA mientras esperamos la mesa y luego para mí la espectacular FABADA asturiana tan esperada y que no era para menos, estaba espectacular y acompañada con la “sidrina” más provoca una hamaca debajo de un árbol para dormir la siesta que seguir conduciendo.

El “pote” y el cordero del compadre, el pollo y la carne con patatas fritas y luego el postre de la casa, completó el suculento almuerzo como verán en las fotos en una tradición de la abuela de la familia desde hace no sé cuantos años.
Cangas de Onís, primera parada del segundo día.

Continuamos camino hacia Los Lagos pasando por un lado y detrás la monumental Basílica de la Virgen Covadonga en el Santuario de la misma y que entraremos al regreso, serpenteando el camino similar a las curvas de nuestros Andes merideños y subiendo como quién viaja hacia el páramo. Hermoso el paisaje del camino y más hermoso con su buena infraestructura para el turista y los caminantes de Santiago, los conocidos LAGOS enclavados entre los nevados Picos de Europa que dejan ver su reflejo en el espejo natural que representa sus tranquilas aguas.

Más de 7.000 hectáreas del concejo de Cangas de Onís forman parte del Parque nacional de los Picos de Europa. Dentro del parque se encuentra el conjunto monumental de Covadonga, donde se inició la Reconquista en el año 722. A 12 kilómetros de Covadonga se encuentran los llamados lagos de Covadonga , el Enol, el Ercina y el Bricial, aunque éste sólo tiene agua durante el deshielo, de gran relevancia en el ámbito ciclista y donde buenas fotos nos tomamos.

La bajada de Los Lagos la hacemos más suave y tranquila, deteniéndonos un momento en “El Mirador de la Reina” con una vista sin igual de las montañas que disminuyen su tamaño conforme se acercan al mar y a pocos kilómetros entrar en el área central del Santuario de la Virgen de Covadonga, “LA SANTINA”. Desde este mirador se contemplan hermosas vistas de las sierras septentrionales de los Picos de Europa, de las vegas del Güeña y de la costa cantábrica. Presenta un bellísimo y relajante panorama y se encuentra a poco más de 900 msm., en un espacio del Parque Nacional de Cangas de Onís.
Por los hermosos Lagos de Covadonga en los Picos de Europa

Llegando a Covadonga visitamos primero la cueva con la imagen de la Virgen en su diminuta capilla con la cascada, fuente de agua para los enamorados, y que Tito trató de llevarle un poco a su prima Patricia, pero les respondió por teléfono que “no se le ocurriera”. Este dato sin comentarios queda solo para consumo familiar muy íntimo.

Covadonga (Cuadonga en asturiano y oficialmente Cuadonga/Covadonga) es una parroquia del concejo de Cangas de Onís en el Principado de Asturias, y es la única población, con la categoría de lugar, de dicha parroquia que forma parte del Parque Nacional de los Picos de Europa con una población total de 58 habitantes en 2.54 Km2 y situada a 11 km de Cangas de Onís en la falda del monte Auseva a 257 msm. Posee el conjunto monumental más visitado de Asturias, el santuario dedicado a la Virgen de Covadonga (La Santina), conmemorativo de la Batalla de Covadonga y donde destaca la Santa Cueva donde se encuentra la Capilla Sagrario con imagen de la Virgen de Covadonga y la tumba de Don Pelayo. Según la tradición, en este lugar se habrían refugiado don Pelayo y sus hombres durante la Batalla de Covadonga. Junto a esta se encuentra la Basílica de Santa María la Real de Covadonga, ideada por Roberto Frassinelli y levantada entre 1877 y 1901 por el arquitecto Federico Aparici, de estilo neorrománico construida íntegramente en piedra caliza rosa.

Además en el área de convergencia de la Basílica encontramos la casa capitular , la estatua de bronce de don Pelayo colocada en 1964 y creada por el escultor Eduardo Zaragoza, “La Campanona”, campana de tres metros de altura y 4.000 kilos de peso construida en 1900 en La Felguera cuyo escultor fue el italiano Sortini, donada por el Conde Sizzo-Norris y Luis Gómez Herrero, ganadora del primer premio de la Expo de París y colocada al lado de la entrada de la cueva, y el obelisco con la réplica de la Cruz de la Victoria de 1857, levantado por los duques de Montpensier en el lugar llamado «El Repelao», donde la tradición dice que don Pelayo fue coronado rey.
Además del rey Don Pelayo, también se encuentra enterrado el rey Alfonso I, el Católico.
Covadonga, además de la parte turística, histórica y religiosa, es conocida en el mundo deportivo por la dura etapa ciclística de subida a Covadonga-Los Lagos como etapa final de la vuelta ciclística a España desde 1983.

Fotos a la Iglesia por todos lados, que por sí sola es impresionante, el reflejo del sol del atardecer sobre su caliza rosa, la hace ver de un color inusual y un porte muy señorial. El Rey Pelayo a su lado como símbolo del comienzo de la reconquista de España y el recuerdito de costumbre con una breve entrada a la Basílica y guardar una botellita de agua bendita, completa nuestra emocionante visita al Santuario.
Continuamos nuestro camino de regreso y parece que mientras descendemos el sol se va apurando más para ocultarse, pero nos permite entrar en la población de RIBADESELLA con sus últimos rayos.
Santuario y Basílica de la Virgen Covadonga, La Santina

Ribadesella (en asturiano, Ribeseya) es un concejo de la comunidad autónoma del Principado de Asturias. Limita al norte con el mar Cantábrico, al este con Llanes, al sur con Cangas de Onís y Parres y al oeste con Caravia. Fundada por Alfonso X el Sabio, fue uno de los principales puertos asturianos del siglo XIX. Cuenta con una población de 6.296 habitantes (INE, 2008).
El concejo cuenta también con numerosas empresas dedicadas al deporte de aventura, como piragüismo, espeleología o escalada. El primer sábado de agosto después del día 2 se celebra el famoso Descenso Internacional del Sella, donde acuden deportistas de todo el mundo y se celebra una gran fiesta local.

Caminamos un rato por el paseo de los ganadores del “Descenso Internacional del Sella”, por su malecón y el centro histórico y cultural de esta población de la costa cantábrica y disfrutar de su gente en la calle en este anochecer dominguero. Clases de baile (Pasodoble) para personas mayores en un gran salón en la plaza y un camión de bomberos pegando una “teja” en lo alto de la iglesia, fue lo más que notamos en esta tranquila población y que podrán notar mejor en el VIDEO.
La ancha desembocadura del río con su recodo antes de llegar al mar, hace de este lugar un tranquilo puerto de resguardo para lanchas de pescadores y deportivas, y de gran singularidad para la llegada de los piragüistas al final de la regata de DESCENSO del RÍO SELLA.

Anochece, vamos camino a Gijón, pero será en la afueras, en CASA YOLY, en DEVA, donde complementaremos este día gourmet asturiano en un hermoso lugar de gran ambiente y también maravillosa comida, donde después de muchos años volví a comer “huevos con paratas y chorizo frito” y Tito probó por fin, y le gustaron, los “Chorizos a la Sidra”. Completamos con Cochinillo Frito, tortilla y “morrones con queso y anchoas” que también estaba espectacular. Dos “botellines de sidra” completaron la noche, y por supuesto agua y coca cola para los muchachos y Alicia.

Como manifiestan en su página WEB, “CASA YOLI data oficialmente desde el año 1901, fecha con notificación de licencia y reseña que le convierte en uno de los establecimientos más antiguos de Asturias. Generación tras generación, intenta conservar la esencia de “merendero asturiano”, con productos típicos, trato familiar y enclavado en medio de la naturaleza.

Un ambiente entrañable y acogedor, para comidas, meriendas y cenas. Picoteo y raciones, con un carácter informal, en un entorno de lo más agradable, siempre bajo la premisa de mantener nuestro espíritu. Quizá este sea el hecho que nos diferencia, junto con una cocina tradicional, elaborada de forma casera, y un puro ambiente familiar”. Así lo sentimos y lo disfrutamos para retirarnos satisfechos ya entrada la fría noche de clara luna con sus círculos concéntricos que pocas veces se aprecian, y regresar al hotel después de este agitado día a descansar.

Atardecer en Ribadesella y cena en Casa Yoly
 Acompañé a pie a los compadres un par de calles por el muro para bajar la comida mientras Alicia, Tito y Baby se quedaron en el hotel. No recuerdo la hora pero ya es bastante tarde y mañana siguen las visitas. Ya hablamos con las primas y quedamos en vernos mañana y con Pupi y Mary Cruz, si el tiempo nos alcanza, y como mañana vamos a la estación de esquí asturiana de PAJARES, bajar a almorzar con ellos a León...