Las 11 de la mañana se está haciendo costumbre para salir, tan así que ayer en la Plaza del Pilar de Zaragoza, a un simpático marchante canario que conoce Venezuela, de la lotería de España ONCE, le compramos un “quintico” con el 1111 frente a la Basílica de “La Pilarica” .
Una de las paradas obligadas de hoy por recomendación de Rafael Santos, de Miami Travel, es conocer las Bodegas Torres en Vilafranca del Panadés (Penedés en Catalán).
Gracias a nuestra incomparable “Letizia”, llegamos sin dificultad a una de los tres viñedos que tienen en esta hermosa región y donde existe el principal centro de acopio de todas las vendimias, su centro cultural y de visitas, museo del vino y museo personal de la Familia Torres que por cinco generaciones ha dado a conocer sus excelentes vinos y brandys, llenando a la región de los principales premios nacionales e internacionales. Cómo algo curioso tuvimos la oportunidad, como verán luego en las fotos, de pasar por debajo del arco que simboliza la línea imaginaria del Meridano de Greenwich y disfrutar de hermosos campos con cerezos floreados.
“Son muchos los pasos dados a lo largo de nuestra historia para consolidar un apellido: Torres.
Son más de 130 países en los que el nombre Torres se asocia a vino de calidad. Desde sus tres centros, Cataluña, Chile y California se ha gestado esta labor… El nombre de la familia Torres aparece en la historia de Cataluña desde el siglo XVII. Nuestros viñedos ocupan hoy 1300 hectáreas seleccionadas entre las mejores Fincas y climas de la región.
El empleo de la más moderna viticultura y enología, la conservación de las técnicas tradicionales, y la renuncia al uso de productos químicos han contribuido al éxito de Torres.”
Desde la noche anterior en el hotel de Zaragoza habíamos hecho la reserva vía internet para el Tour de la tarde y, como buenos “ingleses”, a las dos en punto de la tarde hacíamos nuestra entrada bajo una persistente llovizna al centro de visitas TORRES. Parece que por la lluvia no se presentaron otros turistas, y tuvimos la suerte de tener un tour privado para nosotros cuatro, que incluso, mientras secaban el trencito que nos llevaría a recorrer las instalaciones, tuvimos también la dicha de conocer el MUSEO privado de la FAMILIA. Todo por solo 6 euros por persona.
Comenzamos con un audiovisual sobre la historia de la familia Torres y de la bodega, continuando, antes de montarnos en el trencito, con una visita multimedia percibiendo olores característicos de las cuatro estaciones-procesos por la que pasa la uva desde la vendimia hasta el vino.
Posteriormente realizamos el recorrido entre las viñas con sistema de audio-guía y con las ventanas cerradas porque la lluvia impertinente seguía cayendo sobre la finca. Sin bajar del tren, se hace una visita multisensorial por el interior de la bodega Waltraud. Llegando a la conclusión que el menor de los Torres, encargado del centro, estudió en alguna escuela de DISNEY.
Posteriormente se realiza una parada para ver una de las grandes bodegas donde se encuentran cientos de barriles de roble, americano y francés, recibiendo la explicación de la amable guía sobre cómo se fabrican los barriles y el tiempo de almacenamiento de cada uno, temperatura, humedad, etc., y los varios miles de ellos que tienen que reemplazarse cada año.
Terminamos con una degustación comentada de uno de sus vinos blancos. “Una copa de vino Torres para saborear el resultado de nuestra historia.”
Posteriormente pasamos a la tienda especializada, donde adquirimos el video, tres botellas de vino, uno blanco (Viña Esmeralda Penedés, el mismo que degustamos) y dos tintos (Ibéricos- crianza de la Rioja y Sangre de Toro) con un perfecto embalaje para viajar en avión. También adquirimos una singular chaqueta TORRES, para Tito, por si el frío arrecia… Para ampliar información visita Bodegas Torres
Terminada la visita hicimos una breve parada en otra bodega de la localidad pero estaba cerrada, por lo tanto decidimos recorrer el casco histórico de Vilafranca del Penedés, con su Catedral en lo alto de la montaña y sus estrechas calles del mejor estilo medieval, pero no mucho tiempo, apenas un recorrido en el carro para tomar algunas fotos, ya que la entrada a Barcelona no debe ser muy suave que se diga y preferimos hacerla de día, que aunque estamos cerca, todavía nos falta comer algo en el camino. La GALERÍA FOTOGRÁFICA habla por si sola......Más información sobre Vilafranca del Penedés.
Bodegas TORRES y Villafranca del Penedés |